domingo, 16 de noviembre de 2014

HOSPITAL POSADAS: CRÓNICA DE UNA MUERTE ANUNCIADA




La muerte del joven camillero Emauel García, quien falleciera al intentar salvar a un paciente psiquiátrico que intentaba suicidarse desde la terraza del Hospital Posadas  arrojándose al vacío –y arrastrando  a Emanuel-  no puede  ser adjudicado a un “accidente laboral”  sino que resulta ser un crimen social y sanitario que terminó por cobrar la vida del paciente y el trabajador.
Los propios testimonios que describen la tragedia hablan por sí solo sobre el desguace que la Salud Pública y Mental está atravesando en las unidades hospitalarias públicas, especialmente de la Provincia de Buenos Aires (aunque el Hospital Posadas depende del Estado Nacional), en gran parte promovido desde las presuntas leyes progresistas en el campo de la Salud Mental que el Gobierno kirchnerista se anota como un poroto de “la Década Ganada”. Durante la madrugada del jueves 13, el paciente  arribó a la Guardia Médica del Hospital Posadas, acompañado de sus familiares, padeciendo un cuadro de crisis aguda. Fue inmediatamente derivado a la Guardia Psiquiátrica, la cual está ubicada en el séptimo (y último) piso del Hospital, con una terraza lindante! En un descuido y sin las garantías mínimas necesarias, el paciente logró ingresar a la terraza donde se produjo el trágico desenlace.
El dato es que de acuerdo a la denuncia de los trabajadores y profesionales del nosocomio -que horas posteriores ocuparon y pararon el Hospital, además de cortar la Autopista Ricchieri como señal de protesta- la muerte de Emanuel (y el paciente) resultó ser una “Crónica de una Muerte Anunciada”: ya se habían producido hechos similares que obligaron a los trabajadores a exigir a las autoridades trasladar la Guardia Psiquiátrica del Séptimo Piso al Planta Baja, lo cual fue desoído por los directivos del Hospital por “falta de espacio”. Cabe mencionarse que el intento de auxilio de Emanuel no correspondía a sus tareas formales ya que desempeñaba como camillero; los trabajadores denunciaron además que “las puertas de acceso a la terraza estaban libres” (en una Guardia Psiquiátrica lindante a una terraza en un séptimo piso!) y que “hay un hermoso edificio adelante pero no se resolvieron  las condiciones de trabajo del servicio de rehabilitación y psiquiatría… faltan insumos y equipamiento…aunque las ventanas tienen rejas, no hay servicio de internación psiquiátrica específica” (Clarín, 14/11/14).
La Ley Nacional de Salud Mental, aprobada en el año 2010  y reglamentada el año pasada –venerada tanto por el kirchnerismo como por casi todo el arco “progresista”- insta al cierre de los hospitales monovalentes de Salud Mental (comúnmente llamados “neuropsiquiátricos”) y a efectuar las internaciones psiquiátricas en los hospitales generales “con recursos necesarios” (Art. 28, Ley 26.657 ). De hecho, el Gobierno Nacional en su Plan de Salud Mental ha fijado el año 2020 como plazo final de cierre de los hospitales monovalentes. Mientras muchos pretendían insinuar que la Ley abriría las puertas de la “desmanicomialización”, desde estas páginas anticipábamos que en nombre de una presunta reforma se profundizaría el ajuste y la privatización de la salud pública y mental.
En el artículo “Hecha la Ley, Hecha la Trampa” (Prensa Obrera 02/12/10 - ver versión completa  en link http://www.po.org.ar/noticia/ley-nacional-de-salud-mental-hecha-la-ley-progre-hecha-la-trampa-privatista) , cuatro años atrás, advertíamos algunas consecuencias del cierre gradual de sectores de internación psiquiátrica en monovalentes y el traslado de las mismas a hospitales generales, “…la situación planteada al día de la fecha resulta ser la manifiesta situación de colapso de los hospitales generales (y no sólo monovalentes) en todo el país. Los "recursos necesarios" librados a la "interpretación" de los gobiernos capitalistas provinciales y municipales (sumado al Estado nacional) en la perspectiva del traspaso planteado directamente abriría una instancia de agravamiento de la atención en la red hospitalaria, particularmente en lo que se refiere a la asistencia de pacientes psiquiátricos internados…    
Al “día de la fecha”, y de acuerdo a lo denunciado por los trabajadores, lo que prevalece en el Hospital Posadas es precarización laboral, jornadas extenuantes para enfermeros y otros profesionales y un derrumbe edilicio. El carácter tragicómico de las muertes también juega su papel: el actual Director del Hospital Posadas, el confeso kirchnerista Donato Spaccavento,  al momento de asumir como Secretario de Salud del entonces Jefe de Gobierno Jorge Telerman, había declarado en una entrevista a Página/12 en el año 2006   Quisiera que se recuerde mi gestión como la que terminó con los manicomios en la ciudad de Buenos Aires…me gustaría que la gente se acordara de mí diciendo: ´El Tano Spaccavento pasó a la gente de los manicomios a la comunidad”. (Página/12, 23/03/06).

Hernán Scorofitz

1 comentario:

  1. Excelente analisis, una vez el colapso sanitario salta por la pata mas floja. El htal Melchor Romero cerro sus puerta para la guardia, provocando el colapso del sistema regional, pero la ley avala internaciones en htales generales claro, que se encuentran igual o peor que los neuropsiquiatricos. Estamos ante tentativa del colapso ya en carne propia, que no paguemos los trabajadores su menosprecio por la salud publica.

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